Desde hace un tiempo, la humanidad se fue alejando de la naturaleza. Las grandes ciudades, nos dejaron sin horizonte. Los edificios, sin cielo. La comida manufacturada y el Delivery sin aromas a hogar en nuestras casas… Las mujeres trabajando afuera, condenaron a los niños a Crianzas sin la presencia confiable de sus mamás.
Todo fue cambiando, la vegetación, la vestimenta, el clima.
Las Redes sociales nos plagaron de falsos contactos y nos amenazan con confinarnos al ostracismo de las pantallas y al desencuentro. Pendientes están muchas veces las reuniones de amigos, el café con los otros, las rondas de mate.
Bebé a Bordo intenta invitarte a una vida mejor.
Para eso en este número tratamos de inspirarte para que roces de nuevo lo natural y te acuerdes de la esencia de ciertas cosas.
NATURALEZA a tu Mesa y a tu vida.
Feliz noviembre